Cape Coral evalúa imponer una tarifa anual de $600 a propietarios de viviendas residenciales en alquiler, lo que podría afectar a unos 10,000 dueños en toda la ciudad.

La propuesta ha generado preocupación por su posible impacto en los inquilinos, especialmente en los de bajos ingresos, en medio de una crisis persistente de vivienda asequible. Algunos sugieren que la tarifa debería aplicarse únicamente a propiedades de alquiler a corto plazo, como las de vacaciones.

Actualmente, la ciudad cobra una tarifa única de $35 por registro a los propietarios de alquileres. La nueva tarifa representaría un aumento significativo y podría disuadir a algunos dueños de listar sus propiedades, afectando el turismo y los negocios locales.

La ciudad explica que la tarifa busca mantener actualizada la información de contacto de los propietarios para facilitar la aplicación de las normas municipales. Calculan que el 20% de los ingresos se destinaría a la recaudación y fiscalización.

Cape Coral enfrenta una sobreoferta de unidades multifamiliares, con una tasa récord de vacantes del 29.7% en el segundo trimestre. Más de 2,100 unidades nuevas se construyeron el último año, lo que ha reducido los precios de alquiler.

El Concejo Municipal también consideró destinar los fondos recaudados a un Programa de Desarrollo Turístico para financiar proyectos comunitarios como piscinas, centros recreativos y salas de artes escénicas, infraestructuras escasas en la ciudad.

Algunos miembros del Concejo están abiertos a aplicar la tarifa solo a propiedades de alquiler a corto plazo, mientras otros rechazan la medida en su forma actual, y piden más análisis y modificaciones. El monto de $600 podría ajustarse, ya que en otras ciudades la tarifa anual puede llegar a $2,500.

Una audiencia pública para discutir la propuesta está programada para el 4 de junio.

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